Carlos Barbarito


PABELLÓN DE INCURABLES

(Seis esperas vanas)

Fotografía: Liliana Sánchez, 2008.

Fotografía: Liliana Sánchez, 2008.


I

Supe de pronto que no eras

lo que creía, claridad matutina;

no eras esa luz, reflejo puro

en el vidrio. Se hizo entonces

incierta la vía entre los árboles,

giró sin sentido la brújula

y lo que fuera traje se volvió,

para siempre, despojo.

Y se hizo tarde. Y no hubo reposo.

Una tormenta impidió todo viaje,

toda fuga. Fue largo

lo que hasta allí era breve

y la espera consumió el fruto

antes de que madurase.

Papel seco, cáscara, la risa.

La voz, certeza rota, sumergida.

¿Qué hago aquí, todavía,

qué espero, la ventana abierta,

los ojos abiertos, los brazos extendidos?


II

Permanece frío ante el cielo

que se curva hacia abajo,

el fatuo embeleso de la bestia

por su propio reflejo en el agua,

el cincel que se oxida, el cerrojo

que traba la única puerta hacia el día,

la soga, que espera, la sombra,

que no espera. Frío

ante lo carbonizado y lo incierto,

lo medido y lo sepultado,

la memoria, el anhelo, la acritud,

el cieno. Languidece,

en silencio, inmóvil,

apoyado contra un muro.

Si un perro viniese

y la lamiera la mano, ¿andaría?

Si un viento soplara

y le trajese, entre pólenes y semillas,

el eco de una voz amada,

¿despertaría?


III

Sumerge la mano en la sombra

y la cree, por un momento, agua.

No sueña.

Sueña con un maniquí bajo la lluvia.

Muere y despierta en la misma cama,

bajo la misma frazada.

Afuera, abejorros entre las flores,

lejanos ladridos de perros,

que no ve ni oye.

Al alba, como siempre,

habrá un llamado que no atenderá

y, del otro lado, de nuevo,

tal vez por última vez,

una boca pura, una música celeste y pura:

por qué no vamos al mar,

por qué en el mar no nos desnudamos.


IV

Dije amor, única instancia

cuyo fermento al aire no horroriza.

Dirán momentáneo reflejo

en el agua quieta,

en la pared que el musgo no protege.

Pero, de todos modos, ¿dónde?

¿Enrollado

bajo la tierra,

caído en el pliegue

de ningún sueño,

apenas baba de las cosas,

escena de arte de belleza

que se representó una vez,

pasó y ahora es sólo pez que desgarra

el frágil mar de la memoria?



V

Garabatea vida

sobre una pared despintada;

abajo, el agua inmóvil

que nunca desgastará la piedra.

Invierno, a cada golpe de viento

se repite la imagen de una casa que se derrumba.

Se arropa y no deja de estar desnudo.

Se desnuda y no deja de estar cubierto.

En la madera, una costra.

En el suelo reseco, restos de fuego, astillas.

Y en cada cosa vista o tocada,

el eterno e invencible misterio

que une la palabra cristal con la palabra hija,

se quiebra, los fragmentos se dispersan.



VI

Oyeron, respiraron,

sintieron, durmieron, despertaron.

Hubo gravidez, frutos,

silencio, bordes, alimento.

Y fluir, corteza, danza.

Estuvo la inocencia y pasó.

Se oyó un gran ruido

de estrella rota en su centro.

Luego sal, ramas afiladas,

charcos, arena, sombras.

¿Qué envejeció sino el mundo?

¿Qué mundo surgió

sino una tenaz sucesión de residuos?

Entonces, ¿volver a escribir el libro

con lo que quedó, éter

o niebla, oquedad,

figuras sin nada que las lubrifique?


***

Carlos BarbaritoCarlos Barbarito nació en Pergamino, Argentina, el 6 de febrero de 1955. Poeta y crítico de artes plásticas, su obra ha recibido numerosos reconocimientos como el Premio Fundación Alejandro González Gattone, Premio Fondo Nacional de las Artes, Premio Dodero de la Fundación Argentina para la Poesía, Premio Bienal de Crítica de Arte Jorge Feinsilber, Premio César Tiempo, Premio Raúl Gustavo Aguirre de SADE, Menciones de Honor Leopoldo Marechal y Carlos Alberto Débole, Gran Premio Libertad, Premio Francisco López Merino, Premio Hespérides y Mención Plural de México, Premio Iparragirre Saria 2005, Premio Praxis de Poesía (México D.F.) y el reciente Prix Du Chasseur Abstrait 2010 de Francia.

Su obra abaca libros de poesía y de crítica de artes plásticas. Poemarios como Poesía quebrada, Teatro de lirios, Éxodos y trenes, Páginas del poeta flaco, Caballos y otros poemas, Parte de entrañas, Bestiario de amor, Viga bajo el agua, Meninas/Desnudo y la máscara, El peso de los días, La luz y alguna cosa, Desnuda materia, La orilla desierta, Piedra encerrada en piedra, Un fuego bajo un cielo que huye.

Su labor de crítico de artes plásticas se encuentra en libros como Acerca de las vanguardias, en Arte argentino siglo XX, y Roberto Aizenberg. Diálogos con Carlos Barbarito.

Ha publicado en diarios, revistas y páginas de Internet de Argentina y de Chile, Uruguay, Brasil, Colombia, Venezuela, Costa Rica, Cuba, Puerto Rico, México, Nicaragua, Estados Unidos, España, Portugal, Alemania, Reino Unido, Suecia, Rumania, Alemania e Italia.

Sus textos sobre arte y literatura y su obra poética están traducidos, en parte, al inglés (por Brian Cole, Héctor Ranea, Stefan Beyst, y Ricardo Nirenberg), al francés (por Chantal Enright, Jean Dif, Frie Flammend, Elina Kohen y Patrick Cintas), al portugués (por Andréa Santos , Andréa Ponte Ana María Rodriguez González, Rudolph Link y Alberto Augusto Miranda) y al holandés (por Stefan Beyst).

Es miembro del Consejo Editorial de la revista Matérika de San José de Costa Rica.

Para saber más:

http://vigabajoelagua.blogspot.com
http://es.wikipedia.org/wiki/Carlos_Barbarito

http://carlosbarbarito.lalupe.com/
http://d-sites.net/barbarito
http://www.writers.net/writers/25829
http://www.facebook.com/carlos.barbarito

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