La literatura en la red: recursos pedagógicos y edición electrónica

Artículo originalmente publicado en el portal La sombra del membrillo, 2006.

ÍNDICE

I. LITERATURA ELECTRÓNICA
1. Estudios
1.1 UOC y UNED
1.2 Ámbito universitario
1.3 CNICE
1.4 JAM
2. Ejemplos
2.1 Tipos de literatura electrónica
2.2 Best… downloaded
2.3 Escritura colectiva
2.4 Al lado del maestro
2.5 Creación multimedia
2.6 El poeta es un programador
2.7 Libro digital: lectura y creación

II. RECURSOS PEDAGÓGICOS
1.La biblioteca infinita
1.1 Bibliotecas virtuales
1.2 La biblioteca soñada
1.3 Clásicos
1.4 Contemporáneos
2. Recursos para estudiantes
2.1 Guías de lectura
2.2 Webquests
2.3 La palabra mágica: juegos
2.4 Plan de Fomento de la Lectura

III. EDICIÓN ELECTRÓNICA
1. Atomización de la publicación
2. Nuevas formas de edición
3. Una experiencia: LSM

I. LITERATURA ELECTRÓNICA

1. Estudios

“–Querida, vivimos en una época de cambio–, dijo Adán mientras acompañaba a Eva fuera del paraíso”. Esta cita de un teólogo británico que a Gabriel Ferraté le gusta recordar puede ser un buen punto de partida para que nadie se abrume con lo que vamos a presentar aquí. Los docentes que acabaron su formación universitaria básica hace tan sólo cinco años probablemente tengan muy leve o nula noticia de una realidad que se está desarrollando en el mundo de la creación literaria: la llamada literatura electrónica o ciberliteratura o literatura digital o e-literatura, que no designa simplemente las obras nacidas para la imprenta y luego trasvasadas a la pantalla informática, sino las “producciones originales creadas desde y para un entorno digital”.
(http://www.uoc.edu/in3/hermeneia/cast/linies_de_recerca.htm#3 )

Web del grupo Hermeneia1.1 UOC y UNED
La referencia es obligada. En nuestro entorno, una de las miradas más atentas hacia este fenómeno creativo la encontramos en la Universitat Oberta de Catalunya, una universidad esencialmente innovadora por su carácter virtual. En ella, el grupo Hermeneia (dirigido por Laura Borràs) se ha propuesto el estudio y sistematización de esta nueva realidad:

«el grupo Hermeneia se propone llevar a cabo una investigación orientada a la aplicación de los sistemas informáticos interactivos que integran las morfologías de la información (texto, imagen, sonido) a la literatura, proponiendo un análisis crítico en torno a las repercusiones que entraña esta aplicación.

Desde un punto de vista práctico, pretendemos sistematizar los conocimientos sobre la materia, desarrollar un mapa de los estudios literarios en la red, y poner estos recursos al alcance del tejido universitario europeo mediante la creación y el mantenimiento de nuestro portal de referencia.»
http://www.uoc.edu/in3/hermeneia/cast/objectius.htm

Como parece lógico, la educación a distancia tiene que aportar contribuciones relevantes a la creación digital. SELITEN@T, (http://www.uned.es/centro-investigacion-SELITEN@T/publiact.html) Centro de Investigación de Semiótica Literaria, Teatral y Nuevas Tecnologías, se creó en 2001 por iniciativa del Catedrático de Literatura de la UNED José Romera Castillo. Este centro, que organiza cursos, congresos, publicaciones como la revista Signa, ha editado obras como Teatro, prensa y NNTT (1990-2003).

En la propia UNED, Universidad Española de Educación a Distancia, existe una opción de adquirir publicaciones en formato digital: Liberuned. El estudiante o lector interesado no tiene que desplazarse a librería alguna, puede descargar textos de carácter universitario como Teoría de la novela y novela española del profesor Francisco Abad Nebot. (http://www.liberuned.com).

1.2 Ámbito universitario
Desde otro muy interesante recurso digital nacido en Madrid, la revista Espéculo (dirigida con enorme valentía e inteligencia por Joaquín Mª. Aguirre desde la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid), se creó una sección llamada Hipertulia. Su responsable, Susana Pajares Tosca, define Hipertulia como

“página dedicada al hipertexto y a la hiperficción que quiere cubrir parcialmente el vacío que existe en castellano sobre estos asuntos. Queremos reunir artículos que analicen y discutan las nuevas teorías, así como textos de ficción de autores dispuestos a probar las nuevas herramientas que la tecnología les ofrece.

No nos atrae lo nuevo y la experimentación como fin en sí mismos, sino que queremos aquí reflexionar sobre unos cambios tecnológicos que están transformando nuestra concepción de la palabra escrita, y a los que no podemos dejar de prestar atención como profesionales de la comunicación o la literatura.”
http://www.ucm.es/info/especulo/hipertul/bienven.htm

El carácter efímero de estas iniciativas a veces es muy notable. Hipertulia ha dejado de actualizarse desde 2002. Es de destacar que, por ejemplo, es más fácil encontrar una reseña del Congreso “Under Construction: Literaturas Digitales y Aproximaciones Teóricas” (14-16 de abril 2004, U.O.C., Barcelona) en una revista informática como PCWorld que en una revista literaria tradicional: http://www.idg.es/pcworld/noticia.asp?idn=35406. En la Universidad de Sevilla ha habido alguna tentativa de grupo de investigación que parece haberse detenido (la revista digital Mundo posible, que cuenta con asesores como el profesor Jorge Urrutia, de la Universidad Carlos III, tan sólo ha editado un número en junio de 2004: http://www.hum550.net/revista/ )

En la propia Universidad Complutense de Madrid existe un grupo de investigación multidisciplinar llamado LEETHI (Literaturas Españolas y Europeas del Texto al Hipertexto) que organiza en septiembre de 2006 un ambicioso congreso internacional llamado Literaturas: del texto al hipertexto. (http://www.ucm.es/info/leethi/index.php ). Una de sus líneas de trabajo es la detección de un “nuevo modelo cognitivo”.

“Frente al entusiasmo de los primeros teóricos del hipertexto, fascinados por la disolución de las fronteras entre autor y lector y por las posibilidades de una aparente ruptura de la linealidad narrativa, en los últimos años vemos nacer interrogantes sobre la función social del hipertexto que no dejan de generar desasosiego:

  • En la configuración de las identidades, por la deslocalización de los interlocutores en su diálogo y la desestabilización de la autoría debido a la carencia de emplazamiento físico determinado que conduce a la desterritorialización del hipertexto, algo que el libro tradicional suplía por su carácter fijo e inmodificable.
  • En la configuración de los sistemas, por cuanto que la cibercultura está produciendo desplazamientos que cuestionan las fronteras entre géneros y los principios del canon, mientras el traslado a nuevos soportes por parte de los nuevos monjes que somos conlleva modificación de la memoria histórica y exige nuevas responsabilidades sociales.
  • En el proceso de enseñanza-aprendizaje, pues el uso de hipertexto implica el abandono de la relación de verticalidad maestro-discípulo, basada en la autoridad, para pasar a una relación horizontal, caracterizada por una didáctica cooperativa translocal”
    (http://www.ucm.es/info/leethi/lexias/lex_hip.php)

Siguiendo con las iniciativas universitarias, José Luis Orihuela, profesor de Escritura no lineal y experto en blogs (autor de un reciente libro sobre este fenómeno), promueve desde la Universidad de Navarra recursos como RIC (Recursos en Internet para Comunicación: http://www.unav.es/digilab/ric/) con una zona específica para la hiperficción.

Portada de Literatura y CiberculturaParece necesario recordar también otra excelente y sólida publicación creada desde el ámbito universitario: Tonos digital. (http://www.um.es/tonosdigital/znum10/index.htm). Nacida en 2001 en la Universidad de Murcia, permite al usuario acceder a textos que sólo podría encontrar hasta ahora en revistas universitarias especializadas: estudios, entrevistas en audio, comentarios de texto, reseñas.

En la Universidad Carlos III de Madrid tenemos el lujo de contar con el profesor Antonio Rodríguez de las Heras, director del Instituto de Cultura y Tecnología Miguel de Unamuno (entre otros muchísimos cargos) y una de las máximas autoridades de todo lo referente al mundo digital. Desde la web del Instituto podemos acceder a publicaciones (incluso libros enteros), actividades… Y en esta misma universidad ubicada en Getafe se encuentra también el responsable de un reciente volumen de lectura imprescindible para los interesados en el tema: Domingo Sánchez-Mesa (2004), Literatura y cibercultura, Madrid, Arco Libros.

1.3. CNICE

En el mundo educativo, el CNICE (Centro Nacional de Comunicación e Información Educativa) dedicó el número 3 (enero de 2003) de su revista Red digital a los “Nuevos espacios de creatividad”. Allí se puede leer, por ejemplo, el artículo de Francisco García “La narrativa hipermedia aplicada a la educación”

http://reddigital.cnice.mecd.es/3/firmas/firmas_francisco_ind.html

Lo peculiar de este artículo es que es de los pocos existentes en castellano que están concebidos en formato intertextual y multimedia. Aquí el movimiento sí se demuestra andando. El discurso teórico y su expresión recorren un interesante acercamiento. Podemos encontrar con imagen, audio y animación explicaciones de conceptos como la narrativa hipermedia, la heterarquía de los textos, la interactividad y el hiperrelato, el hipertexto… A la teoría se añade un ejemplo de relato hipermedia basado en El diablo en la botella, de Stevenson.

1.4 J.A.M.

Pero quien desee saber lo que se cuece en torno a la literatura digital y todo lo relacionado, ha de acudir a las publicaciones de José Antonio Millán, que en sí solo abarca una universidad entera de investigación, difusión  y creación. Desde su web (http://jamillan.com) podemos disfrutar de ingenios como la sección Flor de Farola, colección de textos florecidos fuera del libro y otros soportes tradicionales. Y podemos hallar permanentemente su atenta mirada a distintos campos de la creación. En especial, a la innovación digital en secciones como Libros y bitios (edición digital y tradicional).

Desde esta web podemos seguir el rastro de obras fundacionales como Hamlet on the holodeck, (Hamlet en la holocubierta, editada en España gracias a J. A Millán) de Janet H. Murray (Paidós, 1999), que ha sido considerada como la Poética de Aristóteles de la era digital. Se nos permite leer la introducción de la propia autora, dos artículos críticos y un artículo de la traductora (http://jamillan.com/hamletintro.htm).

La profesora Murray es pionera en la docencia de la cibercreación. En la actualidad es profesora y directora del Graduate Program en Digital Media en la School of Literature, Communication, and Culture at Georgia Tech, U.S.A.  En su Hamlet describió nuestra época como “época incunable de la narrativa digital” (Murray, 1999: 41) y lanzó su visión del futuro ciberdrama, del ciberautor o ciberbardo cuya actuación tendría como resultado algo bastante alejado de la fijación y perpetuación en el tiempo del texto literario en papel.

  1. Ejemplos

“Cada texto informático puede ser, a la vez o separadamente, móvil, engendrable, inmediato, interactivo y/o deslocalizado. Rasgos específicos que distinguen radicalmente la literatura producida por ordenador de la que se designa habitualmente con el nombre de literatura, pese a su base común en la producción de textos”. Jean-Pierre Balpe, “Literatura por ordenador”, Telos, http://www.campusred.net/telos/anteriores/num_031/opi_perspectivas4.html

Ya en 1959, el ingeniero Théo Lutz y el lingüista Max Bense consiguieron programar en Alemania un “calculador” para generar versos. Eran seguramente los primeros textos cibernéticos de la historia. Las manifestaciones de la literatura electrónica son hoy múltiples.

2.1 Tipos de literatura electrónica

La Electronic Literature Organization (ELO, Organización de la Literatura Electrónica), radicada en la Universidad de California, recoge una completa lista de producciones que nos puede dar una idea de las tendencias existentes:

“What is Electronic Literature?

The term refers to works with important literary aspects that take advantage of the capabilities and contexts provided by the stand-alone or networked computer. Within the broad category of electronic literature are several forms and threads of practice, some of which are:

  • Hypertext fiction and poetry, on and off the Web
  • Kinetic poetry presented in Flash and using other platforms
  • Computer art installations which ask viewers to read them or otherwise have literary aspects
  • Conversational characters, also known as chatterbots
  • Interactive fiction
  • Novels that take the form of emails, SMS messages, or blogs
  • Poems and stories that are generated by computers, either interactively or based on parameters given at the beginning
  • Collaborative writing projects that allow readers to contribute to the text of a work
  • Literary performances online that develop new ways of writing”
    http://www.eliterature.org/about/

Es decir: ficción y poesía hipertextual, poesía cinética en Flash y otras herramientas, instalaciones artísticas informáticas con lectura o aspectos literarios, charlas generadas por inteligencia artificial (chatterbots), ficción interactiva, novelas que utilizan el formato e-mail o SMS o blog, poemas y relatos generados por computador, proyectos de escritura colaborativa, actuaciones literarias en línea que desarrollan nuevas maneras de escritura.

Seguramente la lista parecerá excesiva a algunos (y escasa a otros: por ejemplo, no incluye un producto muy estudiado de la narración digital como son los videojuegos). En páginas destinadas a adolescentes, podemos encontrar una clara vinculación entre narración y videojuegos y, lo que es más interesante, una sencilla y completa invitación a crear videojuegos de argumento original. Véase, por ejemplo, “Computer Games as Storytelling” de Niko Silvestre: http://teenwriting.about.com/library/weekly/aa082602a.htm

De este amplio repertorio, vamos a destacar cinco interesantes ejemplos. En primer lugar, una charla con robot (chatterbot): podemos charlar un rato (eso sí, en inglés) con Alice en http://www.alicebot.org . Si alguien puede preguntarse qué tiene que ver esto con la literatura, de lo que no hay duda es de que es una muestra de escritura de la soledad. Diálogo con una máquina.

Pero este tipo de propuestas tiene manifestaciones de claro contexto literario. Por ejemplo (segunda muestra que destacamos), los diálogos cervantinos de Coloquio perpetuo, un generador de diálogos entre Don Quijote y Sancho. José Antonio Millán comenta el recurso recordando su urdimbre literaria con las ficciones de Borges y con el Taller de Literatura Potencial (OULIPO) de Raymond Queneau, Italo Calvino, George Perec…:

«Rafael Millán los ha extraído del vasto almacén de la Literatura Potencial (o de las estanterías de la Biblioteca de Babel ) para nuestro placer.» (http://jamillan.com/coloquio.htm)

Y Rafael Millán incluye un apartado denominado «Respuestas» que utiliza una cita del Quijote (espléndidamente rescatada) para quien se ponga nervioso ante propuestas como esta y exija un porqué:

«Ahí está el punto, y ésa es la fineza de mi negocio. Que volverse loco un caballero andante con causa, ni grado ni gracias; el toque está en desatinar sin ocasión, y dar a entender a mi dama que si en seco hago esto, ¿qué hiciera en mojado?»

En tercer lugar, un relato hipermedia. En un proceso de varios años, el colombiano Jaime Alejandro Rodríguez ha ido investigando (ha dedicado su tesis doctoral al relato digital y tiene una abundante producción ensayística en papel y en la red sobre cibercultura) para crear una hermosa narración que primero fue libro, luego hipertexto y ahora hipermedia: Gabriella Infinita. En octubre de 2006, Jaime Alejandro ha dado una vuelta de tuerca más a su labor investigadora y creativa y ha presentado Golpe de gracia, un «hipermedia interactivo». Estamos, sin duda, ante un hito de la historia de la literatura digital en español. Rodríguez (con su equipo de la Universidad Javeriana de Bogotá) se ha atrevido a la construcción de un videojuego que abre un nuevo paradigma: una obra digital de enorme complejidad metafórica (sus claves están profusamente explicadas en un blog específico) que integra una pluralidad de formas comunicativas (animación, juego, imagen, música, voces y sonidos, texto). La densidad significativa propia de la literatura consagrada se introduce en un nuevo formato, el del videojuego, vampirizado hasta ahora por el negocio del entretenimiento. En Golpe de gracia la chispa argumental de una experiencia cercana a la muerte sostiene esta valiente propuesta que abre un complicado y ambicioso camino.

«Golpe de gracia constituye un dispositivo de sensibilización, dentro de una estructura pedagógica y comunicativa que busca la construcción colectiva de conocimiento. En ese sentido, cada mundo del multimedia promueve dicha construcción articulando su propio escenario – interfaz al desarrollo de una o varias acciones, a las estrategias de fomento de la interacción y del juego, a los resortes dramáticos (orientados a motivar la participación del usuario) y a un ambiente “enciclopédico” que facilita la contextualización y la profundización en los diversos temas y asuntos propios del relato». Jaime Alejandro Rodríguez, «Golpe de Gracia: narrativa, juego y conocimiento»

En cuarto lugar, poesía cinética. Wordtoys es uno de los proyectos de la argentina Belén Gache, autora de muy estimables obras de creación en papel y de ensayos imprescindibles como Escrituras nómades. Del libro perdido al hipertexto (Buenos Aires, Limbo, 2004). Wordtoys es un mágico libro digital con múltiples propuestas. Por ejemplo, un procesador de textos rimbaudiano que produce vocales de colores siguiendo el poema “Voyelles” de Rimbaud: “ A noir, E blanc, I rouge, U vert, O bleu: voyelles…”. En «El idioma de los pájaros», estas aves son “máquinas-poetas” que van recitando versos según pincha el usuario. Los “Poemas de agua” surgen de los grifos de un muy realista lavabo que el usuario activa.

En quinto lugar, una ficción interactiva con animación. Con animaciones construidas con el muy extendido programa Flash, Un mar de historias combina elementos de la narración oral (leyendas gallegas marinas) con el formato digital que permite ver escenas animadas, escoger narradores y trayectos de lectura.

2.2 Best… downloaded

La existencia de múltiples muestras de esta nueva literatura efímeras y poco convincentes ha favorecido la potenciación de empresas como Eastgate, que se dedica a la creación de software para la creación de hipertexto y a la venta de obras electrónicas. Con el refrendo del New York Times, Eastgate tiene a gala ofrecer “serious hypertext”. Así destaca en su portada:
«…the primary source for serious hypertext»  — Robert Coover, The New York Times Book Review http://www.eastgate.com/

En la enorme selva de la literatura electrónica, Eastgate se ha convertido en un canon de la nueva creación. Y en un enorme negocio.

Las nuevas herramientas han hecho posible el paso del best seller (más vendido) al best downloaded (más descargado). El mercado ha descubierto de inmediato las posibilidades del libro digital, que supone una reducción máxima del coste de producción (desaparece el papel, la impresión, la encuadernación, la distribución física). Estas ofertas no solicitan la imaginación creadora compartida, como en otras tendencias, sino más bien el número de tarjeta de crédito. Hacia el año 2000 se produjo el fenómeno de la aparición de novelas de autores consagrados que se lanzaban por anticipado en formato descargable de la red con una enorme repercusión en los medios por el halo de pioneras que las rodeaba.

En España el caso más destacado es el de Arturo Pérez Reverte, que puso en la red una nueva entrega de su serie de novelas sobre el Capitán Alatriste antes de salir a las librerías. En todo el mundo, el caso más conocido es el de Stephen King, Midas absoluto de la literatura actual, que atrajo la atención de los medios con su edición virtual de Riding the Bullet (traducido en España como Montado en la bala).

Encontramos una crónica del fenómeno en Vicente Battista, “La primera gran cibernovela”, CLARÍN, 22 de marzo de 2000:

Stephen King es dueño de una formidable habilidad para los negocios editoriales.

Hace unos días se embarcó en uno nuevo: la exclusiva edición digital de su último libro. Se llama Riding the Bullet, no llega a las setenta páginas y sólo se conoce por Internet. «Tengo curiosidad de ver cuál será la respuesta de la gente -confesó este rey Midas de la literatura-. Eso me permitirá saber si este tipo de propuesta tendrá éxito masivo en el futuro».

Claro que cuando en el interior de ese tubo se coloca un texto de Stephen King el éxito está prácticamente asegurado. En apenas una semana se vendieron más de 400 mil copias de Riding the Bullet.

Desde que comenzó a hablarse del libro digital surgieron ciertas dudas: ¿Si el texto se envía libremente al ciberespacio, cómo se sabrá con exactitud la cifra de libros vendidos? ¿De qué modo se liquidarán los derechos de autor? Stephen King despeja esas dudas. En principio, su libro no sale libremente al ciberespacio. Circula pero perfectamente controlado. Riding the Bullet se entrega mediante pago con tarjeta de crédito (por lo que es posible controlar la venta, ejemplar por ejemplar), con un precio accesible a cualquier lector, sea o no fanático de Stephen King: 2,50 dólares.

Los costos de producción de los libros digitales son infinitamente inferiores a los de los volúmenes impresos: no hay gastos de papel, ni de impresión. Tampoco hay porcentajes para distribuidores y libreros. Un negocio redondo del que, en este caso, participan, a partes iguales, Stephen King y Simon & Schuster.

Para conseguir Riding the Bullet basta con entrar a http://www.simonsays.com y hacer el pedido. Los editores enviarán una copia codificada, por lo que resulta imposible leer la novela fuera de la computadora, ni siquiera se puede modificar el tipo de letra; tampoco copiar o imprimir.

Pese a estas restricciones, Simon & Schuster, en un evidente gesto de generosidad, permite que siete páginas especiales de Riding the Bullet puedan enviarse a cuantos amigos uno tenga en la Red. Una generosidad con trampa. El tradicional boca a boca, en este caso, se convierte en pantalla a pantalla. Todo aquel que reciba esas siete páginas se enterará que el protagonista de Riding the Bullet piensa contar una historia terrible. Pero el relato se interrumpe abruptamente, justo cuando comienza a contarla. Entonces, sobre la pantalla aparece una simpática ventana, invitando a comprar el libro. Es la única forma de saber qué tiene de terrible esa historia ¿Quién no gastaría 2,50 dólares para saberlo?”.

En España, el portal Inicia abrió el 3 de noviembre de 2000 el camino de la edición virtual con la publicación de El oro del rey, de Arturo Pérez-Reverte. El libro salió a la venta exclusivamente en Internet hasta el 1 de diciembre de ese mismo año, momento en que se produjo su lanzamiento en papel. El propio sitio recopila reseñas críticas como la siguiente:»Tras haber navegado en Internet durante un mes y haberse sometido a los embates de los nuevos piratas, los hackers, el Capitán Alatriste abandona, ahora en libro, los campos de batalla flamencos y se embarca en auxilio de Cádiz, atacada por ingleses y holandeses en busca del oro de América» (José Perona, El País).

José Antonio Millán recibía así la experiencia: “En este caso, la creación de la web de Arturo Pérez-Reverte junto al lanzamiento electrónico de su nueva novela, El oro del rey, demuestra que estamos ante un nuevo sistema de información, frente a un nuevo diseño de las relaciones del autor con su público. La línea «caliente» del sitio web más la inmediatez de la distribución del texto electrónico están generando un marco inédito de difusión y recepción cultural. A todos -autores, lectores y editores-, toca explorarlo”.
http://www.capitanalatriste.com/aventuras.html?s=articulos/art_lanzamiento_electronico

Además de la descarga de Internet, algunos ya han visto un filón (más que literario, económico) con la edición de textos en lenguaje SMS para teléfonos móviles. En España, la propuesta pionera parece ser la que la revista Qué Leer hizo al autor de éxito Peter Harris. Se le ha pedido al autor de El enigma Vivaldi que escriba unos capítulos para ser descargados por los usuarios que se den de alta en ese servicio. (Puede leerse la noticia en el diario El Mundo de 8 de enero de 2006). La primera experiencia de este tipo parece encontrarse en China. En Japón, ya hay sitios con catálogos que superan el centenar de obras en formato SMS.


2.3 Escritura colectiva

Si el formato digital revoluciona el papel de editores y libreros, no menos revolución supone para el concepto de autor y el de lector.  La proliferación de creaciones colectivas en la red es enorme desde los años 90. Ya se podía rastrear muestras (desgraciadamente, muchas webs han desaparecido) en España como las siguientes:

En el Boletín Electrónico de iturNet   (http://www.iturnet.es/revista/del_boletin_e_de_iturNet.htm) se puede leer una referencia de agosto de 1996 que hoy en día parece inaccesible:

“en el número 5, del día 13 (martes) de Agosto 1996, dijimos que… Cibernovela interactiva española… «las muy virtuales andanzas de Juanito Deca y Seje Guerrero por los confines de Ispuña» (todo eso nos suena, añadimos) donde se pueden leer capítulos al azar, pasar las hojas, con un botón de comentarios, efectuar incluso extensiones, anotaciones, subrayar…, y todo transladarse al propio ordenador, entero (¿qué es entero si puede ser personal?) o solamente algunos capítulos… es de la CiberRevista Pórtico. En http://www.gn.apc.org/redgrround/.”

Además, ya en septiembre de 1996 hallamos fechada una cibernovela, construida con aportaciones sucesivas y referida como cibernovel.la, escrita en catalán. Se titula Una nit de descans  y comienza así:

“Era la Mercè? No, no podia ser. Vaig fixar la vista al retrovisor: una filera de dones ocupava la vorera de les Rambles, algunes caminaven amunt i avall com aquell ós del zoo. La quarta semblava la Mercè però no podia estar-ne del tot segur perquè feia molt de temps que no la veia. Havíem estat «nòvios», sí, però d’aquella manera innocent, quan erem petits. Els meus pares conexien els seus. Més endavant ens havíem distanciat. Una coincidència aquí i allà, i després res.

No m’ho acabava de creure: no quadrava amb el domicili al carrer Aribau i la torre a Sant Vicenç de Montalt. I, tanmateix, semblava la Mercè. Era possible? Què estava passant? A veure, jo anava baixant les Rambles amb el meu Dos Cavalls al voltant de la una de la matinada, intentant decidir si aquella nit seria techno o britpop, quan, de sobte, a l’alçada de l’Arc del Teatre, mirant distretament per la finestra, vaig veure una amiga de la infància aparentment en actitud de qui espera un client.

Involuntàriament vaig construir una història: el Donat l’havia deixada (o era l’Eusebi?, ja no recordava en quin ordre havien passat per la seva vida aquell parell), després, potser la cocaïna, la necessitat de més diners… Però allò no tenia ni cap ni peus: quants diners podia guanyar allà on estava? A tots els sectors hi havien categories i, a la seva activitat, aquella semblava precisament la més baixa…” (cap. 1, © 1996 Francesc Sabtedí, Barcelona, agost de 1996). http://usuarios.iponet.es/abotey/serial/

La existencia de un dominio con la expresión cibernovela y la popularidad que alcanzó esta web (www.cibernovela.com) parecía potenciar el predominio del marbete cibernovela para designar a narraciones extensas ofrecidas por Internet con posibilidad de participación de los internautas en su proceso creativo. Hacia el cambio de siglo, era frecuente en este tipo de creaciones encontrar alusiones a su novedad, incluso a su exclusivo carácter fundacional. En la cibernovela de Ciudad Futura pudimos leer “Ciudad Futura presenta la primera cibernovela interactiva en español, en la que tú controlas los hilos de la marioneta y nos dices cómo transcurrirá la historia”).

El Clarín digital alude a este fenómeno el 26 de enero de 2000: (“Ofertas seriadas de la web”):

“El mundo de habla hispana también tiene sus melodramas digitales. Las alas del amor, cibernovela interactiva, es un lanzamiento de Yuppi, otro portal latino con sede en Miami (http://www.cibernovela.com). Lo más llamativo de Las alas…, es que los cibernautas pueden participar directamente en el desarrollo de la trama”.

Un encuentro en avión hace nacer una historia amorosa entre un pasajero, Juan Camilo Montesinos y una azafata, Adriana Figueroa.  A partir de ahí, los internautas que visitan Las alas del amor, cibernovela de Ciudad Futura, ven abierta la posibilidad de participar en ella desde varias propuestas: chatear sobre lo relatado, criticar a los personajes en la sección Chismes, hablar de la historia en un foro específico, opinar en encuestas on line, y, lo que es más novedoso como parte de una obra literaria, escribir continuaciones de la narración (que respeten las reglas puestas por el Consejo Editorial de Ciudad Futura: menos de 400 palabras, coherencia con los capítulos anteriores, ambientación y personajes, ofrecer una escena final que mantenga intrigado al visitante). La narración se va salpicando de imágenes y enlaces que llevan a sonidos, fotografías… Uno de los personajes aparece sin foto para enfatizar la capacidad del receptor de integrarse en la historia y poner su cara a ese personaje.

Para sostener la unidad de lo narrado, se ofrece una sección de personajes con datos permanentes sobre ellos. El fenómeno de fans de la novela se favorece al asignar a cada personaje la imagen de actores o actrices arquetípicos (por ejemplo, Montesinos es encarnado por un modelo argentino y actor de telenovelas, Daniel Alhadeff, y Adriana por Anna Sobero, actriz y modelo mexicana de cine y telenovelas).

Nada más visitar la página nos atrapa un ambiente claramente perseguido: tono rosa dominante (con las connotaciones de novela rosa y visión rosa de la vida que posee en nuestra cultura)…

La publicación en línea de Las alas del amor alcanzó 117 capítulos, todo un acontecimiento en este naciente género. Se inició el 9 de noviembre de 1999 y terminó el 31 de octubre de 2000. Su éxito popular no parece corresponderse con su calidad literaria, como puede comprobarse en este fragmento inicial:

“El aeropuerto de San Antonio, Texas, estaba como cada verano lleno a reventar, no cabían ya maletas en los pasillos. Se podía oír el bullicio de la gente entrando y saliendo de esa enorme estructura de asfalto. Visto de lejos parecían avioncitos de papel dejándose caer lentamente, tan ligeritos, tan inofensivos.

El personal de AeroSantis, estaba como todos ahí muy cansados, habían tenido una semana muy difícil. Tenían que enfrentarse con situaciones tan variadas e ingeniárselas para tener una respuesta para cada persona que llegaba a preguntar todo lo imaginable: «dónde puedo conseguir comida para mi perro», «usted sabe qué nos van a dar de comer en el avión», «sabe qué clima hay en Nueva York», «se me ha perdido mi brazalete de oro», «por favor si alguien viene a devolverla mi nombre es tatata…»

Realmente es agobiante el momento de la registración de los pasajeros. Eso de cargar maleta por maleta, pesarla, volverla a cargar aunque te duela la espalda por los miserables días que has pasado haciendo eso solamente…

La tripulación tiene un momento de esparcimiento por lo menos cuando se sientan a platicar con los compañeros, y comer un poco del maní que le dan a los pasajeros.

El viaje era de San Antonio, Texas, al Aeropuerto Jorge Chávez de Lima, Perú, y aquellos viajes con latinos a Adriana le gustaban porque no tenía que esforzarse en su acento americano que tanto le fallaba, sino sabía que podía hablar en español abiertamente. Ahora el que estaba en problemas era el piloto Arthur McLaine, que no entendía ni jota de lo que los niños le preguntaban cuando entraban a la cabina del avión.

Aunque la mayoría eran bilingües no faltaba el americano que por más que se ha propuesto no ha terminado de aprender español.

Ya habían pasado dos horas de vuelo, ya habían servido esa comida horrible que ellos acostumbran y también habían llevado las almohadas y las bebidas. Faltaba más de la mitad del camino.”

“Adriana estaba un poco distraída y triste por la reciente muerte de su mejor amigo Gustavo. Ella le había pedido miles de veces que se deshiciera de esa motocicleta en la que murió, pero nunca la vendió como le había prometido. Adriana había estado trabajando mucho de país en país, y cuando llegaba a su casa era para estar compartiendo con sus seres queridos.

Gustavo iba de camino a casa de Adriana cuando un camión se le atravesó y murió después que vio a Adriana corriendo para ayudarlo. Digamos que chocó justo a unas cuadras, pero hasta casa de ella fue a sonar el gran estruendo que provocó el impacto.

Inmediatamente ella supo de lo que se trataba, estaba ya corriendo desconsolada, sabiendo que estaba muerto, no hizo más que levantar su cabeza cuando él la dejó caer al mismo tiempo que vomitaba sangre.”

La llamada webnovela Ámame dos veces (http://www.telenovela-world.com/stories/story-es/story.pl ), parece una de las pioneras en castellano en utilizar un programa que permite a los lectores ser los autores. Al final de cada capítulo se ofrecen dos posibles continuaciones: cada cual deberá elegir una de ellas. http://www.telenovela-world.com/stories/story-es/story.pl

El sueño de Borges de El jardín de los senderos que se bifurcan ha encontrado en el tiempo una tecnología que lo hace posible:

“En todas las ficciones, cada vez que un hombre se enfrenta con diversas alternativas, opta por una y elimina las otras; en la del casi inextricable Ts´ui Pên, opta –simultáneamente– por todas. Crea, así, diversos porvenires, diversos tiempos, que también proliferan y se bifurcan.” (Ficciones, 1944).

Desde la primera mitad del siglo XX, Borges se adelantaba a lo que luego (en 1965) Ted Nelson llamaría “hipertexto”(véase, por ejemplo, Definiciones de hipertexto, de Adelaide Bianchini) y que no ha llegado a hacerse habitual hasta el siglo XXI.

2.4 Al lado del maestro

Dentro de la revolución que Internet supone para el concepto de autor, una forma diferente de cibernovelas es la que se ofrece como continuación de un fragmento inicial escrito por un autor de éxito. Se invita a los lectores a participar en ese proyecto colocando su nombre al lado de maestros de prestigio. En España este formato lo inició al parecer el diario El Mundo con La novela del 2000, comenzada por Francisco Umbral. En artículo del propio diario encontramos una completa referencia al fenómeno:

La cibernovela de elmundolibro.com llega a su ecuador.

…El periodista Walter estaba en su casa aquella noche de primavera leyendo una novela del Oeste cuando sonó el teléfono, como con cierta urgencia. Era su amigo Afrodisio:

-Walter, soy Afrodisio y te llamo porque eres mi amigo y porque eres periodista. Han matado a mi mujer. Está muerta y desnuda en la piscina.(…) ¿Sospechas de alguien?

-Sí. De un delfín del delfinario».

Con estas palabras de Francisco Umbral comenzó el 31 de mayo La rebelión de los delfines, la cibernovela por entregas de elmundolibro.com. Dos meses y medio después, esta aventura literaria, llamada La novela del 2000, llega a su ecuador. Porque consta ya de 12 capítulos, la mitad menos uno de los previstos. Y al portal literario de EL MUNDO ya están llegando posibles capítulos 13. Usted mismo puede enviar una continuación, siguiendo las instrucciones que aparecen en la dirección http://www.elmundolibro.com.

Como casi todas las semanas (menos las de profesionales) se aceptan nuevas aportaciones hasta el domingo. El lunes aparecen los capítulos preseleccionados y el miércoles se integra a la novela el ganador.

Así, hasta el día 15 de noviembre, cuando aparezca el capítulo 25 de esta novela escrita tanto por profesionales como por aficionados. Una última entrega que firmará Javier Tomeo, que sucederá al citado Umbral, y a Espido Freire, Carmen Rigalt, José María Merino y Eduardo Mendicutti.

Además de, entre otros, al periodista deportivo Juan Ignacio Gallardo, el psicólogo Eloy Barroso, el economista Pablo Pece, el celador Juan Manuel Gil, el ingeniero Alejandro Tucho y el físico Enrique Joven, el único amateur que, por ahora, ha conseguido hacer doblete; todos ellos recibirán como premio dos lotes de libros y el privilegio de figurar en la edición impresa de la novela, que publicará Espasa Calpe.”

Leandro Pérez Miguel, “Creación por Internet”, El Mundo, 17 de agosto de 2000.

Portada de La isla del fin de la suerteEn mayo de 2001 el Círculo de Lectores propuso en su web la experiencia de una “novela interactiva” con la participación del premio Nadal del 2000, Lorenzo Silva. En su página propia, www.lorenzosilva.com, este autor anunciaba:

“A partir del 8 de mayo, podrá asistirse a un peculiar experimento. Siempre he sostenido que el escritor debe acatar la soberanía del lector, y que el novelista responde, por encima de todo, ante aquellas personas con quienes se comunica a través de sus historias. Lo demás es hojarasca, prescindible. Pues bien, llega el momento de demostrarlo. Para ello, y con el concurso de la red, jugaremos a construir una novela entre todos, otorgando voz, voto y decisión a quienes la lean. Serán los lectores quienes decidan, incluso, el final. La aventura cuenta con el patrocinio, el apoyo logístico y el impulso ilusionado del equipo de Círculo Digital, la sección electrónica de Círculo de Lectores. Mi agradecimiento desde aquí a la magnífica gente de ese equipo, porque no han regateado esfuerzos para lograr que la aventura salga lo mejor posible. Quienes queráis ver el resultado, abierto a cualquier lector, quedáis emplazados a partir del 8 de mayo en http://www.circulo.es”

El portal del Círculo, con muy atractivo material gráfico, presentaba (hoy parece, desgraciadamente, inaccesible) así la iniciativa:

“Lorenzo Silva nos reta a un juego literario sin precedentes. El ganador del premio Nadal 2000 invita a los amigos de Círculo a ser coautores de su última creación La isla del fin de la suerte, una novela en la que los lectores deciden la marcha de la trama: «Creo que es hora de proclamar que el lector es el protagonista primordial de esta cosa tan antigua y tan frágil, pero extrañamente resistente, que llamamos literatura (…) Y creo que una buena forma de demostrarlo es cederle a ese alguien la capacidad, siquiera sea parcial, de decidir lo que haya de suceder en el libro». ¿Juego o novela? En esta aventura interactiva, tú decides.”

El autor parece decantarse por la definición lúdica:

“Esto, naturalmente, es un juego. Creo que tengo el deber de advertirlo porque no es ésta la manera en que suele escribirse una novela, o al menos no es ésta la manera en que yo he aprendido a escribirla. El novelista aspira a controlar la historia, a sentirse dueño de la invención y de la trama, del tiempo de la escritura y de su sentido. En este artefacto, en cambio, me dispongo a renunciar a esa soberanía y a compartirla con otros. Por eso no puedo considerarlo una novela como las demás, y por eso, y también porque en sus páginas me propongo deslizar alguna que otra travesura, afirmo que se trata de un juego. Ahora bien, juego no es sinónimo de frivolidad. De hecho, hay juegos extremadamente serios, y algunos hasta se precian de resultar solemnes. Digamos que éste no llega a ese extremo, porque la solemnidad termina estropeando la diversión, y también se trata de divertirse. Pero es lo bastante serio como para tener un motivo, y en consecuencia, ajustarse a unas reglas que me comprometo desde aquí a respetar.”

El funcionamiento del “juego” es el siguiente:

“La mecánica del juego es sencilla. La novela se divide en seis capítulos. Para cada uno de ellos se propondrán tres finales, que se someterán a votación de los lectores. El final más votado para cada uno de los primeros cinco capítulos, determinará por dónde continuará el siguiente. El final más votado para el sexto y último capítulo será el final de la novela”.

Así, al final del primer capítulo, las tres opciones ofrecidas obtuvieron el siguiente porcentaje de votos:

Pobre Lucía, en la flor de la vida. 28%

Pobre Mónica, no tenía buen aspecto. 23%

Pobre Ignacio, ya no podría presidir el banco. 49%

Habla Lorenzo Silva de novela compartida y recuerda antecedentes literarios en papel:

“Así funcionará esta novela compartida, que me honra no poder firmar en solitario, sino en compañía de un grupo de lectores. No es un juego totalmente novedoso (como saben, por ejemplo, los conocedores de ese hermoso libro titulado El astillero, de Juan Carlos Onetti, que también permite al lector escoger el final), pero tampoco carece de incertidumbres”.

El comienzo de la novela muestra un evidente engarce con la tradición literaria en papel (arranca con claro homenaje a Moby Dick de Melville):

“Llamadme Ismael, o como os dé la gana. Yo escribiré Ismael porque tengo buenas razones para ocultar mi verdadera identidad, y porque resulta muy fatigoso llamarse a sí mismo X. o I., o verse obligado a buscar maneras de eludir a toda costa, a lo largo de un relato en el que uno interviene, la mención de su propio nombre. Tampoco pienso decir a qué me dedico, ni dónde nací, ni si recuerdo con nostalgia mi niñez o si mis padres me inflaban a mamporros y eso me dejó un trauma irremediable que condiciona mi carácter, bla, bla, bla. No sé vosotros, pero yo estoy harto de que la gente me cuente su vida y además se muestre siempre convencida de que su vida tiene que importarme un huevo. Yo hice, yo tengo, yo creo, yo exijo, yo necesito, a mí me duele, a mí me gusta, a mí me pica…”

La novela se editó después en papel. En su prólogo, Silva concretó el valor innovador de la experiencia:

“me gusta pensar en esta novela como en una obra compartida, en la que la autoría ve resquebrajado su tradicional carácter individual para abrirse a la multitud. Pero no a una multitud cualquiera, sino a esa multitud de lectores activos y generosos que constituyen, a mi juicio, la única y verdadera república de las letras (por más que algunos pelmazos y no pocos pedantes pretendan apoderarse de la expresión para ponerla al servicio de sus rancios intereses). Se trata, por fortuna, de una multitud lo bastante amplia, y por eso la novela no quiso excluir a nadie, sino al revés, incluir a todo aquel que deseara perder un poco de su tiempo leyendo un libro; invitándolo, de paso, a hacer sonar su voz e influir en lo que en el libro sucedía. Nadie tuvo que pagar un duro ni acreditar ningún otro requisito que el de saber leer y poder manejar un ordenador para participar en el juego. Sin duda la fórmula era mejorable, pero me pareció una buena manera de dar al lector el protagonismo que a menudo se le niega, al relegarlo al papel de consumidor de ejemplares que sostiene, mediante el pago de su precio, las finanzas y el prestigio (o lo que es peor, la vanidad) de quienes escriben.” http://www.lorenzo-silva.com/libros/isla.htm

2.5 Creación multimedia

La creación colectiva o compartida de una obra literaria es una de las revoluciones que encierra la cibernovela, pero hay más caminos de innovación. Es el caso de autores que no ofrecen su obra para una continuación por otros, sino que la entregan como acabada pero con unas características muy especiales: integrando elementos multimedia ausentes de cualquier obra literaria en papel.

Algunos ejemplos casi pioneros en castellano han quedado desbordados hoy por el avance de la tecnología. Un ejemplo puede ser Adolfo Pérez Agustí, que recrea los mitos de los mass media y la literatura de fantasía en una muy considerable producción:

El maldito disco de Cole Porter http://usuario.tiscalinet.es/adolfo/coleporter2/
H.G. Wells y la máquina del tiempo http://usuario.tiscalinet.es/adolfo/hgwells/
Peter Pan ha vuelto http://www.terra.es/personal/p.agusti/peterpan.htm
King Kong rescata el Titanic http://personal3.iddeo.es/masters/KingKong/

Todas sus cibernovelas parecen dejar la huella de una persona capaz de integrar el conocimiento de los recursos informáticos con su personal sensibilidad literaria. No es casualidad que Pérez Agustí fuera responsable de una recomendable web, http://www.canalficcion.com, donde sistematizaba su afición a la creación de fantasía desde las posibilidades multimedia. Agustí ha publicado libros digitales como: Monstruos en el cine (Libros en Red, 2000) y Viaje a las estrellas (Libros en Red, 2001).

Pérez Agustí no persigue una edición en papel de sus novelas, sino que sabe que su formato es uno de sus aciertos inherentes:

“Esta es una historia que puedes leer gratuitamente. Es una cibernovela, con animaciones, música y fotografías, y te servirá para conocer datos reales de sus protagonistas y disfrutar con la aventura más extraordinaria que hayas podido leer.

Como cualquier escritor, mi interés es conseguir que mis obras sean leídas y por eso las publico en la red, para que disfruten con ellas el mayor número posible de lectores. Si quieres ayudarme a mejorar mi obra, puedes escribirme o enviarme un e-mail”

 (http://personal3.iddeo.es/masters/KingKong/index.htm)

En El maldito disco de Cole Porter, por ejemplo, utiliza (aparte de fotos, música, animaciones) algo tan sencillo –y tan poco costoso de obtener desde el soporte virtual– como la tipografía cromática significativa: cada color de texto se corresponde con una voz narrativa:

“Yo acababa de perder a mi mujer Jeannie, después de haberla cuidado y mimado durante su larga y dolorosa enfermedad. En los días que siguieron a su muerte y entierro, salvo observar indiferente a la gente que me rodeaba, comer con desgana los platos que me servían y cuidar mi aspecto lo imprescindible para no parecer un pordiosero,  apenas si había efectuado nada bueno con mi vida. En esa época hasta los rayos de la luna me hacían daño en los ojos, hinchados de tanto llorar y solamente encontraba consuelo deambulando sombrío por las calles de Hollywood”.

18 de diciembre de 1973. Aquella mañana, Gene Kelly volvía a recrearse entristecido en su destino, tratando de encontrar un detalle, un recuerdo, que le sacara de esa pesadilla  tan real  que le estaba sacudiendo su corazón. Sabía que, desdichadamente, no se trataba de un mal sueño y que ahora mismo era simplemente una de esas  personas a las cuales el destino les recuerda –como si no lo supieran– que los seres humanos somos mortales.

Aturdido por la muerte de su esposa había decidido salir de ese sopor y emprender la que, con seguridad, sería la última aventura musical de su vida, justo en un momento en el cual sus doloridas articulaciones le indicaban que estaba a punto de finalizar sus días de bailarín.”

Por todo ello, Pérez Agustí evidencia una clara conciencia de género: la cibernovela de autor con todas sus consecuencias.

El progreso actual de las herramientas informáticas hace posible webs llenas de atractivo multimedia como la poética de la brasileña Cléa Rubiane, perfecta integración de tecnología, sensibilidad y belleza. El espléndido diseño se alía con la utilización de músicas diversas seleccionadas con acierto. En muchas pantallas se facilita al navegante la lectura al ir ofreciendo automáticamente el avance del texto:

http://www.rubiane.com/

2.6 El poeta es un programador

Frente la eclosión abrumadora de narraciones y poemas en la red, el desarrollo de propuestas teatrales parece relativamente escaso. La propia esencia del fenómeno teatral, que difícilmente soporta hoy con éxito el traslado a un medio audiovisual, complica su crecimiento en la web. En un sitio como Escenario de ciberteatro encontramos propuestas para creación compartida de una obra, atribución de papeles de actor…

Seguramente, una de las muestras de mayor interés en este campo nos llega de la mano de La Fura del Baus, siempre atentos a la innovación e investigación en los lenguajes creativos. Su web  http://www.lafura.com  es un excelente ejemplo. Su Laboratorio de teatro digital ( http://lafura.upc.es/wip/Principal.htm) ofrece múltiples opciones de participación: presencialmente como espectador, actor o creador, por Internet mediante envío de propuestas, mediante videoconferencia…

Sobre los ciberpoemas, de los que hablaremos más adelante desde otra perspectiva, merece la pena recordar la gigantesca biblioteca poética virtual que se pone al alcance de cualquier usuario de la red. Si en muchas bibliotecas familiares de nuestro entorno la presencia de una decena de libros de poesía puede ser una excepción, en todo hogar conectado a Internet hay una posibilidad abierta de acceder a miles, millones de poemas.

En español, es imprescindible destacar (por la abundancia y calidad del contenido) la página del profesor Luis Salas, Poesía en español: http://www.poesia-inter.net/index.htm

En Palabra virtual. Antología de poesía hispanoamericana, se puede acceder a cerca de mil poetas. Esta web mexicana, nacida del trabajo compartido de una salvadoreña, una mexicana, un argentino y un español ofrece además de poemas una sección de herramientas para el poeta (corrector en línea, diccionario, contador de sílabas, conjugador de verbos) y servicios como los e-poemas (postales poéticas) con sugerentes fondos musicales y poemas renovados en ventana emergente. http://palabravirtual.com

Portal de poesía ofrece una variada muestra de antologías y libros completos de poesía contemporánea (la mayoría de los poemas en castellano y algunos en presentación bilingüe bable-castellano). Dentro del mismo portal pero en otras secciones se accede a muy interesantes colecciones de haikus, poemas de tradición oral, poemas ilustrados, poesía experimental, letras de canciones. http://www.portaldepoesia.com

Para quien quiera disfrutar no sólo leyendo, sino también oyendo poemas, en A media voz puede escuchar textos de los más destacados creadores del siglo xx en la voz de sus autores, desde Juan Ramón Jiménez hasta Álvaro Mutis, pasando por Neruda, Borges, León de Greiff, Benedetti, Lezama Lima, Cernuda, Salinas, Guillén… http://amediavoz.com/poetas.htm

El Festival internacional de poesía en Medellín publica en su web una antología de poetas de más de cien países que han participado en él. Enlaza con más de 180 antologías de poesía de todo el mundo, con numerosísimas webs sobre poetas, proyectos poéticos y poesía sonora.
http://www.epm.net.co/VIIfestivalpoesia/html/antologia.html

Además de los poemas nacidos en papel (o recogidos en papel) y volcados a la red, es necesario recordar la amplísima experimentación que los nuevos soportes están favoreciendo. Los ciberpoemas, infopoemas, anipoemas… son muchas veces creaciones hechas desde y para el entorno digital. Valga como muestra de una producción muy dispersa y en continua investigación algún ejemplo como los que siguen.

«Rear-View Drive» de Michael Arnzen es parte de “Gorelets”, una colección de poemas nacidos para PDA. El trabajo del creador ya no se limita a las palabras, su conocimiento y uso de la tecnología es un factor esencial. Si para Aristóteles “el poeta es un imitador” y para Pessoa “el poeta es un fingidor”, en la literatura electrónica el poeta es un programador. Como escribe Joan-Elies Adell:

“la poesía electrónica no es únicamente una poética de la pantalla (esto es, de lo que va a ser leído), sino también, y especialmente, una poética de la programación: de los códigos, de los algoritmos y de los cálculos que constituyen su fundamento: la tarea del escritor la encontramos no únicamente en el texto a leer, sino en la programación. Es, pues, el poeta electrónico un creador de potencialidades, no de concreciones”. http://www.uoc.edu/in3/hermeneia/sala_de_lectura/jelies_adell_poeticas_electronicas.htm

Claro que las auctoritas del mundo digital (al igual que conceptos de autor y lector) han cambiado bastante. En su propia web, Michael Arnzen incluye valoraciones de su obra Gorelets como:

What’s Gorelets?
«One of THE best writer sites ever!» Feo Amante
http://www.gorelets.com/

No parece que “Feo amante” tenga mucho peso en el mundo universitario o de la crítica. Probablemente ese es su valor: la deslocalización de las bendiciones críticas. Feo Amante es el autor de un sitio (http://www.feoamante.com ) que nos advierte: «If you don’t help to support this site, I’ll have to find a REAL job. And nobody wants THAT! Click on my eyes for secure PayPal service!»

Por mencionar algún otro ejemplo de poetas programadores, el Electronic Poetry Center, de la Universidad de Búfalo, se centra en la poesía experimental que aprovecha los recursos tecnológicos (el hipertexto, la animación con Flash, la integración de imagen y sonido…). http://epc.buffalo.edu/

Para facilitar el trabajo al nuevo autor (y hacer negocio, claro), el mercado ya se ha ocupado de crear herramientas de fácil uso. Writer´s café es un muy interesante ejemplo creado desde Edimburgo de herramienta para la creación electrónica. El software ayuda a crear una narración facilitando los útiles que puede necesitar el escritor: recopila y muestra notas, enlaces, citas, ideas, imágenes, tramas, estructura, personajes… Incluye un módulo llamado Word tiles (Drag and drop poetry) que permite la creación de un poema en pantalla (mediante el sencillo “arrastrar y soltar” del ratón) partiendo de una base de palabras personalizable. Puede descargarse una interesante versión demo para conocer la herramienta en: http://www.writerscafe.co.uk/

El papel del lector, a su vez, cambia radicalmente en esta nueva literatura. El concepto de literatura ergódica (desarrollado por Espen J. Aarseth en Cybertext: Perspectives on Ergodic Literature . Baltimore: Johns Hopkins U.P.,1997) designa a una literatura que demanda un esfuerzo del lector, quien desempeña un papel activo:

“During the cybertextual process, the user will have effectuated a semiotic sequence, and this selective movement is a work of physical construction that the various concepts of «reading» do not account for. This phenomenon I call ergodic, using a term appropriated from physics that derives from the Greek words ergon and hodos , meaning «work» and «path.» In ergodic literature, nontrivial effort is required to allow the reader to traverse the text. If ergodic literature is to make sense as a concept, there must also be nonergodic literature, where the effort to traverse the text is trivial, with no extranoematic responsibilities placed on the reader except (for example) eye movement and the periodic or arbitrary turning of pages.” http://www.hf.uib.no/cybertext/Ergodic.html

2.7 Libro digital: lectura y creación

Además del libro electrónico como objeto comercial, se encuentra abierta otra prometedora tendencia que persigue explorar las posibilidades del libro digital. El usuario ya no es reducido a un papel de mero consumidor, sino que puede interactuar con el autor de la obra o incluso puede crear y difundir masivamente la suya.

Un excelente ejemplo es Los estilitas de la sociedad tecnológica, libro digital de Antonio Rodríguez de las Heras, que se puede descargar gratuitamente en http://www.campusred.net/intercampus/rod8.htm. El propio autor recrea su contexto crítico:

“El libro es un ensayo sobre la sociedad tecnológica que está emergiendo. Bajo la metáfora de una ciudad imaginaria (cuyo nombre, Moriana, he tomado de Las ciudades invisibles, de Ítalo Calvino), señalo un conjunto de características de la sociedad que se está conformando por efecto de una tecnología cada vez más influyente en nuestras vidas y en la marcha del mundo. El lector recorre la ciudad de Moriana, y sus detalles son la clave para ir obteniendo los rasgos de la sociedad tecnológica.

Pero este ensayo no se ha escrito para que termine en el papel, sino para experimentar una forma de entender la escritura en el soporte digital y en el espacio de la pantalla electrónica.

Cuando decidí escribir este libro digital, me propuse que su realización siguiera unos principios teóricos que había que probar sobre una obra concreta y con la participación de los lectores.

Estos principios los puedo agrupar en tres:

[…]Dentro del mismo libro de Los estilitas hay una parte dedicada a exponer esta concepción del libro digital, pues recojo como uno de los rasgos interesantes de la sociedad tecnológica las transformaciones que van a tener el libro y los lectores.

Y en el foro que está asociado al libro se irán detallando más estos planteamientos.”

A lo largo de los años han ido apareciendo herramientas de creación (bastante accesibles a cualquier usuario) de libros electrónicos. Enlazando ya con nuestro próximo apartado, para el ámbito educativo es muy útil visitar de vez en cuando la web de Educared (http://www.educared.net), gigantesco proyecto patrocinado por Telefónica que difunde y promueve la innovación educativa. En esa web podemos ser orientados a propuestas recientes como la de Educalim, que facilita la generación de libros interactivos multimedia para la red.

http://www.educalim.com/demos_es/libro.html

II. RECURSOS PEDAGÓGICOS

  1. Biblioteca infinita

La red ha hecho posible el sueño de Borges de una biblioteca infinita. El acceso inmediato a obras situadas en cualquier lugar del mundo parecía impensable hace sólo unos años. A continuación destacamos algunas muestras llamativas de esa biblioteca infinita que es Internet. Es muy reciente la batalla de los grandes de la informática por la digitalización de libros. Los avances de Google se pueden ver en http://www.books.google.com. Puede seguirse esta controversia en la revista Telos (Cuadernos de Comunicación, Tecnología y Sociedad) en el artículo «La digitalización de fondos bibliográficos. De Alejandría a la biblioteca infinita en Internet» de Norberto Gallego (21/12/2005).
http://www.campusred.net/telos/articulonoticia.asp?idArticulo=2&rev=66

1.1 Bibliotecas Virtuales

La mayor biblioteca virtual en castellano es la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Nacida en 1999 desde la Universidad de Alicante, supera el cuarto de millón de páginas servidas cada día. La falta de rigor que es tan fácil de encontrar en la red se ha intentado paliar con el trabajo de un equipo dirigido por docentes e investigadores universitarios. Alberga dentro de sí un gran número de portales de enorme calidad, referencia obligada en la red: sobre Cervantes, Calderón, Galdós, Valera, Andrés Bello, Moratín, Cadalso, Clarín, Pardo Bazán, Lope de Vega, Meléndez valdés, Larra, Samaniego, Martin Códax, Tirant lo Blanc, Celestina, Pereda, Mio Cid, Meléndez Valdés, Maragall, Sor Juana Inés de la Cruz, Mesonero…
http://www.cervantesvirtual.com/

En Francia existe otra gigantesca biblioteca: Gallica. Contiene más de 70.000 obras digitalizadas de acceso gratuito. Quizá su mayor virtud (y a la vez defecto) es que la mayoría son accesibles en modo imagen y no en modo texto. http://gallica.bnf.fr/

1.2 Biblioteca soñada

No es muy extraño que un amante de los libros haya deseado acceder a esos ejemplares que sólo están al alcance de muy pocos. La web sobre el Mio Cid hecha desde la Universidad de Texas (Austin) permite cumplir ese sueño. No sólo ofrece imágenes de calidad del manuscrito conservado en la Biblioteca Nacional de Madrid, sino que también nos facilita el sonido de cómo podría ser leído en su tiempo.
http://www.laits.utexas.edu/cid/

En esa biblioteca soñada podría también caber la posibilidad de acceder a las obras completas de un autor fundamental aunque lejano en el tiempo. Las de Gonzalo de Berceo están en una muy cuidada web que permite leer artículos de los más prestigiosos investigadores de la literatura medieval.
http://www.vallenajerilla.com/berceo/

Y podría ser un mágico alto en el camino encontrar este tesoro: una especie de hechizo que nos haga volar hasta la British Library y nos permita acceder al manuscrito original de Alicia de Lewis Carroll. Si el hecho ya puede ser emocionante, el formato desarrollado en el proyecto Turning Pages es una auténtica maravilla de nuestro siglo.
http://www.bl.uk/index.shtml


1.3 Clásicos

Web Clásicos Hispánicos del Centro Virtual CervantesEn España, el Centro Virtual Cervantes ha creado un portal con magníficos recursos. Todo un lujo es poder leer de forma gratuita una edición crítica del Quijote de enorme calidad:

http://www.cvc.cervantes.es/portada.htm

Y otros textos esenciales, como las Rimas de Bécquer o El perro del hortelano, por ejemplo:

http://www.cvc.cervantes.es/obref/perro_hortelano/edicion/


1.4 Contemporáneos

Pero no sólo de clásicos se alimenta la red. Los autores contemporáneos de prestigio gozan también de canales de difusión de calidad. Un buen ejemplo es el Portal poesía contemporánea de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, hecha desde la Universidad de Alicante. Allí se puede acceder a grabaciones en audio y en vídeo de recitales y conversaciones de poetas como Alberti, Benedetti, Benítez Reyes, Luis Alberto de Cuenca, Luis García Montero, Ángel González, Carlos Marzal, Gonzalo Rojas…
http://www.cervantesvirtual.com/portal/poesia/index.shtml

  1. Recursos para estudiantes

2.1 Guías de Lectura

Si buscamos materiales concretos útiles para estudiantes, podemos destacar ejemplos como el recurso creado por el grupo de investigación LEETHI de la Universidad Complutense de Madrid. Se trata de una Guía hipertextual de Lectura de textos.

http://www.ucm.es/info/guias/indexe.htm

Además de ir orientando una lectura en profundidad de los textos (mediante apartados como temas, espacios, tiempos, ritmos, perspectivas…), se ofrecen saltos hipertextuales que enriquecen la lectura. Por ejemplo, el lector del estremecedor poema “El secreto” de Luis Rosales tendrá ocasión, gracias a este recurso, de recrear el contexto del poema pulsando en la opción “Leer entre textos”. Allí podrá ver cómo se le enlaza a otro texto, el libro de Gibson Vida, pasión y muerte de Federico García Lorca que

afirma que Federico García Lorca, amigo de la familia Rosales, buscó amparo en la casa de Luis Rosales los últimos días de su vida. Federico fue fusilado. Luis Rosales no tuvo noticia de la inesperada captura de su amigo en su propia casa y no pudo hacer nada para exigir la liberación. El hecho de haber asistido tan de cerca de la muerte de Lorca dejó un sello indeleble en la sensibilidad de Rosales que admiraba la obra de su amigo y sus poemas viraron inmediatamente hacia un estilo más pesimista. El «cadáver ahorcado» del niño, que aparece en el texto, es el cadáver que el hombre adulto está condenado a llevar consigo sobre sus espaldas, hasta la muerte.”

http://www.ucm.es/info/guias/luisrosales/index.htm

2.2  Webquest

Los trabajos de investigación (por muy sencillos que sean) encargados por docentes a estudiantes no pueden mantener el mismo formato que hace unos años. Para avanzar más allá de la simple copia o parafraseo de la abundante información que la red y las enciclopedias digitales facilitan, hace falta plantear otras estrategias. La llamada “webquest” puede ser una buena opción.

Bernie Dodge, profesor de tecnología educativa en la Universidad de San Diego, es considerado uno de los más destacados innovadores en tecnología educativa de Estados Unidos. Es el creador del “webquest”, actividad educativa que propone una investigación utilizando los recursos que proporciona la Web. El propio Dodge ha explicado el origen del invento:

“Utilicé un motor de búsqueda con el que traté de localizar algunos nombres para denominar esta forma de enseñanza y pronto me decidí por «WebQuest». En ese momento (febrero de 1995) no existían páginas en las que se encontrara esa palabra. Mis estudiantes utilizaron mi matriz para crear sus propias lecciones interdisciplinarias. Poco tiempo después, Tom March utilizó la estructura para desarrollar «Búsqueda de la China» como parte de su trabajo para la iniciativa de Pacific Bell, «La Educación Primero». Escribí luego algunos «Pensamientos sobre WebQuest», en un artículo para un boletín de educación a distancia y de pronto la idea comenzó a prosperar. Así comenzó todo”.

Al lado de otros recursos como las llamadas “cazas del tesoro”, Dodge distingue:

“La idea clave que distingue a las WebQuests de otras experiencias basadas en la red es la siguiente: Una WebQuest está elaborada alrededor de una tarea atractiva y posible de realizar que promueve pensamiento de orden superior de algún tipo. Tiene que ver con hacer algo con la información. El pensamiento puede ser creativo o crítico y comprende solución de problemas, juicio, análisis o síntesis. La tarea debe ser algo más que simplemente contestar preguntas o repetir mecánicamente lo que se ve en la pantalla. Idealmente, la tarea es una versión en menor escala de lo que los adultos hacen en el trabajo, fuera de las muros de la escuela.”
http://www.eduteka.org/reportaje.php3?ReportID=0011

Algunos ejemplos interesantes de webquests literarias en castellano son:

¿Volverán las oscuras golondrinas?
http://www.phpwebquest.org/wq/webquest_becquer/index.htm

Manuscrito hallado
http://www.educa.aragob.es/ryc/wq/Manuscrito/index.htm

Hacia una España nueva
http://catedu.unizar.es/crear_wq/wq/home/627/index.html


2.3 La palabra mágica: Juegos

Uno de los motores básicos de la red es el entretenimiento. Que además de entretenimiento de otros tipos, haya propuestas lúdicas que puedan acercar al mundo de los libros, es un hecho que merece recordar. La poderosa telefónica ha patrocinado la creación de una atractiva web que acerca el Quijote a los más pequeños: www.telefonica.es/quijote/

El Portal de Educación de la Junta de Castilla y León contiene un atractivo recurso (la Biblioteca) que plantea la lectura como un juego. Mediante animaciones en Flash, el usuario puede elegir un personaje para que le lea un cuento o internarse en una historia interactiva.
http://www.educa.jcyl.es/educacyl/cm/zonaalumnos/tkContent?idContent=3523&locale=es_ES&textOnly=false

También concebido como sencillo juego, desde el Plan de Fomento de la Lectura, un equipo dirigido por Juan A. Olmedo y compuesto por Antonio Fabregat, Rosa Aradra y el autor de este artículo hemos diseñado un sencillo recurso llamado Cibertaller de cuentos. Basado en dinámicas de Gianni Rodari (a quien Antonio Fabregat, autor de la idea, conoció y trató), propone construir relatos que pueden ser creados entre compañeros y compartidos con lectores de todo el mundo.
http://www.planlectura.es/recursos/lectores/cibertaller/index.html?id0=4&id1=12&id2=

2.4 Plan de Fomento de la lectura

http://www.planlectura.es/

Desde el año 2001, la web oficial del Plan de Fomento de Lectura español ha ofrecido recursos para que la tecnología pueda también contribuir a la cultura lectora. El apartado Recursos educativos, en el que vengo trabajando desde hace cinco años, incluye propuestas como las siguientes.

Sala de lectura, una oferta de breves textos anotados para estimular el acercamiento a obras de todas las épocas y géneros.

Crea tu historia, una invitación a disfrutar leyendo lo que otros (o uno mismo) han escrito en colaboración. Allí se plantea la construcción colectiva de cibercuentos y ciberpoemas.

Lectura activa, una herramienta programada en lenguaje Java que invita a leer en profundidad un texto. Se permite al usuario elegir una lectura, subrayar el texto digitalmente, orientar su recepción a través de preguntas, visualizar las herramientas morfológicas (clases de palabras) empleadas por el autor, acceder a un glosario, jugar a componer los campos semánticos dominantes y activar notas aclaratorias de las expresiones más significativas del texto. El a veces tan odiado comentario de texto se sustituye aquí por una propuesta abierta, interactiva, que atiende al ritmo e intereses de aprendizaje de cada usuario, que pertrecha al lector para acceder al corazón significativo de los textos.

Ciberlecturas del Quijote: Cerca de medio centenar de fragmentos de la obra, algunos de ellos accesibles en formato audio, aparecen con ilustraciones originales creadas para este recurso. Cada fragmento va acompañado de notas explicativas y un conjunto de actividades que estimulan la comprensión lectora de modo interactivo.

III. EDICIÓN ELECTRÓNICA

  1. Atomización de la publicación

La eclosión de Internet supone una universalización de la edición de textos. Hasta herramientas tan aparentemente efímeras como el chat, los foros… sirven de soporte para publicar (especialmente poemas, reflexiones, breves narraciones…). Muy reciente es la proliferación enorme de los llamados blogs, diarios personales de usuarios que desean abrir su escritura al mundo.

“Un weblog, también conocido como blog o bitácora, es un sitio web periódicamente actualizado que recopila cronológicamente textos o artículos de uno o varios autores donde el más reciente aparece primero, con un uso o temática en particular, siempre conservando el autor la libertad de dejar publicado lo que crea pertinente. Los weblogs usualmente están escritos con un estilo personal e informal.”.

Así lo define la Wikipedia, proyecto colaborativo de creación de una enciclopedia gratuita (http://es.wikipedia.org/wiki/Blog).

Además de una literatura autobiográfica que puede considerarse un nuevo género, los blogs ya se han convertido en un mero soporte para publicar: comentarios, poemas, relatos, imágenes, audio… La extraordinaria atomización que supone dificulta un seguimiento de publicaciones de referencia. Puede verse un ejemplo en: http://www.directorio-blogs.com/

  1. Nuevas formas de edición

En nuestro entorno, ha aparecido un nuevo tipo de edición relativamente reciente. Se denomina “print on demand” (traducido frecuentemente como «impresión bajo demanda», aunque parece menos calco y más correcto “impresión por pedido”). Hace posible que autores que no quieren o pueden costear una edición común de sus obras, puedan ver su creación en papel impreso y con una tirada a gusto del consumidor: 100 ejemplares, 10… El fenómeno de la enorme necesidad de expresión de mucha gente (especialmente en poesía) que no se corresponde con una equivalente demanda de lectura o adquisición ha encontrado una vía de escape en los nuevos formatos: la impresión por pedido permite al autor ver cumplido su sueño de engendrar un libro tangible; la difusión gratuita y universal de Internet ha hecho posible que millones de poemas y otros textos se encuentren ya publicados a la espera del lector que quiera visitarlos.

Se puede ver un ejemplo en el portal de Libros en Red, que afirma tener más de 150.000 miembros en su club de lectores. Allí mismo puede verse infomación sobre los más difundidos formatos de libros electrónicos a la venta: pdf, lit, exe (ejecutable), pdb (Palm). http://www.librosenred.com

  1. Una experiencia: LSM

Nuestra humilde contribución a la edición electrónica es básicamente un invento llamado La sombra del membrillo (http://www.lasombradelmembrillo.com). Una revista digital de poesía y creación nacida desde el Instituto de Educación Secundaria Antonio López de Getafe (Madrid, España) .

Esta web nació de un convencimiento personal que a muchos les puede parecer disparate: la verdadera tecnología punta del ser humano, el objeto de máxima intensidad y mínimo coste, que no necesita energía eléctrica y genera muchísima energía, es… el poema. Esa chispa mágica que con pocas palabras enciende emociones o risas o pensamientos… Como estos dos versos, máxima expresión de entrega y desgarro concentrada en un instante:

Te ofrezco en mi mano
Los sauces que no he visto

(Leopoldo María Panero, 1948)

O este brevísimo poema de la argentina Alejandra Pizarnik, radical expresión del deseo incumplido:

La carencia

Yo no sé de pájaros,
no conozco la historia del fuego.
Pero creo que mi soledad debería tener alas.

(Alejandra Pizarnik, 1936-1972)

3.1 ¿Cómo nació LSM?

Si nuestro padrino, el pintor Antonio López, buscaba el sol del membrillo en la película de Víctor Erice, el reflejo exacto de la realidad, nuestro proyecto persigue la otra cara de la realidad, la sombra: los sueños y pesadillas, la poesía.

En Getafe, además de un equipo de fútbol en primera hay varias cosas que merecen máximo reconocimiento:

– el ejemplo genial de Ezequías Blanco, creador de probablemente la más completa revista de poesía de España, Cuadernos del matemático, que ha superado los quince años;

–    el Centro de poesía José Hierro, donde encontramos una verdadera hada madrina, Margarita Hierro, que siempre tuvo una palabra de ánimo dispuesta y un gesto de apoyo, ahora continuado por su hija Tacha y Gonzalo Escarpa.

Ambos hechos ayudaron notablemente a que naciera un intento como el nuestro. Una revista de poesía que aunara autores consagrados y creaciones de los más jóvenes.

El origen remoto de esta idea se encuentra en una sencilla anécdota. Una tarde de hace muchos años, el poeta Luis Rosales se acercó a la antigua Casa de la Juventud de Getafe. Ante la peculiaridad del auditorio (el público estaba integrado por una sola persona: yo), los responsables reclutaron jóvenes oyentes que se distribuyeron por las vacías sillas. Rosales tuvo que contestar a duras preguntas sobre su relación con el asesinato de Lorca (losa que le persiguió de forma permanente, aunque si tuvo algún papel parece que fue para protegerle). Pero al poco tiempo se ganó con sus versos a la reticente audiencia y nos explicó cuál era el significado de La casa encendida, uno de los poemas libro más espléndidos del siglo XX. Nos dijo que como la vida nos va quitando a las personas que hemos querido, su casa encendida era el escenario mágico en el que cada habitación se iba llenando de luz hasta recuperar (juntas, a la vez) a todas esas personas que habían ido pasando e iluminando su existencia. Sin duda, de ahí surgió esta Sombra del Membrillo (cuya primera sección en papel se llama «Casa encendida»), que no es ni más ni menos que un intento utilizar la poesía como herramienta mágica capaz de crear una casa encendida que pueda reunir a todas las personas que iluminan o han iluminado nuestra vida.

3.2 Método

El método de desarrollo de esta revista fue una tecnología un poco antigua. Seguro que quedaría mucho mejor diciéndolo con un término anglosajón, pero nuestra técnica empleada fue la de la botella del náufrago… Gracias a la red, fuimos descubriendo sitios y direcciones a los que enviar nuestras botellas. Ante nuestra sorpresa, nos encontramos con la rápida y generosa respuesta de grandes creadores como Lorenzo Silva, Luis Alberto de Cuenca, Luis Antonio de Villena, Rafael Morales (quien nos regaló un manuscrito de un poema inédito, probablemente el último publicado en vida)…

A esas botellas de náufrago se le vino a sumar un auténtico botellón. Gracias al contacto con una publicación de cardiología, el académico y catedrático de la Universidad de Lima Carlos Germán Belli, uno de los más grandes poetas latinoamericanos vivos, se interesó por nuestra revista. Nos autorizó a utilizar el título de uno de sus libros, Hada cibernética, como emblema de nuestro proyecto y como nombre de una de nuestras secciones. En ella reivindicamos, como Belli, una tecnología humanizada, al servicio de la creación y el disfrute del lenguaje poético o de cualquier otro campo artístico.

Portada de ¡Oh, hada cibernética!Esa hada cibernética es la que ha hecho posible un crecimiento impensable de nuestro proyecto al proporcionarnos una ventana abierta al mundo, un espacio de encuentro con otras culturas. Nuestro Concurso de poesía pasó a convertirse en internacional. No sólo pudimos recibir y compartir poemas de todo el mundo, sino que la red hizo posible lo imposible hasta hace unos años: un jurado compuesto por personas de todas partes del mundo. En la primera edición internacional (2004), el jurado estuvo compuesto por los poetas Ana Merino (desde Estados Unidos), Pablo García Casado(desde Sevilla), Elena Medel (desde Córdoba), Belén Reyes (desde Madrid); los profesores Elena Gayán (desde París), Isabel Castells (desde la Universidad de La Laguna, Tenerife), José Emilio López-Carrasco (desde Talavera de la Reina), Paloma Arroyo, Nina Hernández, José Gabriel Moya, Carmen Rey y los colaboradores Alfredo Arias y José Fariña (desde Madrid). Todos ellos pudieron leer y votar los poemas desde una dirección web oculta (es decir, sin gastar ni una fotocopia) en la que no aparecían los nombres de los autores. En esa primera edición resultaron premiados una riojana, una getafense, un segoviano, chileno, un catalán y un emigrante cubano en Miami. La calidad de sus obras nos llevó a empeñarnos en una publicación en papel: Un año de Sombra. poesía adolescente (Salamanca, Celya, 2005).

Uno de los poemas que nos llegó por e-mail y que resultó ser de un estudiante chileno de 15 años, Patricio Javier Abello, puede bastar para ilustrar el interés de esta actividad:

VIVO O MUERTO, AMO…

Vivo o muerto, amo
y madre canto poesías, y padre espero inspiración

aguijón de pelajes ambiguos
miel de abejas viejas

los barcos de febrero se olvidan en septiembre
es hora de la chicha, la empanada y la bandera
aún enarbolando antorchas sabemos que estoy
sedado

madre, es acero forjado en camisas
soy jinete de corceles recónditos
que relinchan al oído, interesantes abismos

padre, no es tu revancha dilapidada
las momias tiernas hablan sangrientamente
llueve en los laureles hambre de quijote

vivo o muerto, quiero
y hermanos
beban del elixir vencido en la gaveta
beban hasta ser mar

vivo o muerto, odio
pero blasfemo, para autoconvencerme de la rebeldía
nunca me gustó la espuma del champagne
siempre me incliné por un vino agresivo

y madre me verás recostado, prometo esa desidia
y padre, volveré en Galeones sin vela
volveré en el cañón

y no soy asesino
me sedujo la hipérbole…

3.3 Presente
Portada de Un año de Sombra, editorial CelyaLSM se ha convertido en una pequeña aventura cultural que organiza conciertos, presentaciones, que ha estado en la Feria del libro de Getafe (donde El Canario-que ha vendido más de un millón de ejemplares en Europa- nos dio su bendición), que ha sacado adelante una serie de publicaciones:

-una revista impresa semestral de poesía y creación (La sombra del membrillo, cuyo número 5 presentamos el 11 de febrero de 2006 en la FNAC de Leganés);

-una página web (www.lasombradelmembrillo.com) que difunde nuestro Concurso de poesía de ámbito internacional,

– una BIBLIOTECA DIGITAL,

– una FONOTECA (que recoge lecturas exclusivas de poetas como Belén Reyes, Mariano Altemir, Norma Nava; canciones; actos como presentaciones, intervenciones en la radio…)

vídeos en la web o en soporte DVD que recogen la historia de nuestro proyecto;

-un libro de poesía adolescente (Un año de sombra, Salamanca, Celya, 2005).

Todas estas actividades, como es fácil comprobar, habitan en nuestra web en soporte multimedia como algo ya cotidiano: texto, imagen, audio, vídeo…

3.4 Equipo

Portada de La sombra del membrillo nº 5Gracias a nuestra hada cibernética hemos ido construyendo una mágica red con amigos y corresponsales en muchos países. Si el adjetivo de mágica parece desproporcionado, bastaría recordar que nuestra corresponsal en India, Ashwini Ganeshan, acudió hace semanas a Getafe para ayudarnos en la presentación de uno de nuestros actos… O que el poeta Jorge Riechmann, que nos regaló un excelente inédito para abrir nuestro número 1, nos condujo hasta Pablo Escribano, estudioso de su obra en Vietnam, que a la vez nos condujo hasta el letrista, músico y cantante del grupo La sonrisa de Julia, Marcos Cao. Marcos nos regaló (nos habría sido imposible costear el caché de un grupo del nivel del suyo, muy reciente pero ya con mucha difusión) un acústico para celebrar la presentación de nuestro número 4 en mayo de 2005. Y después, un inédito de su próximo disco, que en estos días estará mezclando en Nueva York.

En ocasiones anteriores, el genial músico y profesor Joaquín Tafur nos hizo disfrutar con un recital de guitarra que sirvió para bautizar nuestra revista. La poeta Belén Reyes -una de las voces más rebeldes y auténticas de la poesía actual- nos apoyó con un recital en la Taberna encantada (4/2/5) y otro en el Centro de poesía José Hierro de Getafe (19/5/5), éste con la asistencia de Amparo Gastón, viuda de Gabriel Celaya, y la intervención de Joan Gonper, que ha puesto su sensibilidad de poeta y su valentía de editor a nuestra disposición. El joven artista gallego David F. Rivera presentó sus poemas y canciones con la espléndida cantante Irene Pérez en la FNAC y en el Centro de Arte Ciudad de Getafe (22/10/5). El poeta Modesto Calderón, accésit del premio Adonais, nos obsequió un recital callejero a pesar de la lluvia (que también soportó el joven músico Jorge Matesanz) y una cálida presentación de nuestro libro (19/5/5). La joven cantaurora Lola Barroso nos emocionó con sus canciones en la Taberna Encantada y en la FNAC de Leganés (11/2/2006).

Además de todos ellos, un grupo de jóvenes (que se reúne semanalmente capitaneado por el autor de este artículo y por Aránzazu Oteo, subdirectora por aclamación popular) y muchos otros amigos hacen posible que este sueño siga adelante. Gracias a nuestra hada madrina para siempre, Margarita Hierro, y a nuestra hada cibernética del maestro Carlos Germán Belli.

3.5 Nuevos retos

Nos quedan todavía muchos retos por cumplir. Para nuestro próximo número (junio de 2006) ya tenemos pequeños tesoros que aquí adelantamos: un poema inédito de Lorenzo Silva (que siempre nos ha apoyado generosamente) y una canción manuscrita inédita de Javier Krahe. Pero quizá el más importante reto sea conseguir que los jóvenes (especialmente los que arrastran una negativa trayectoria escolar y un rechazo inicial a todo lo que huela a cultura) puedan acercarse a la creación a través de la tecnología y las actividades que nos permite generar. En el número 4 de La sombra del membrillo publicamos un poema nacido como juego (partiendo del magistral Carlos Edmundo de Ory) hecho por un alumno:

Si hace frío, frío un huevo.
Si cuento ocho, como un bizcocho.
Si corro, me corro.
Si como, ¿qué cómo?
Si escribo, me siento vivo.
Si me pegas, soy López Ortega.

Enrique López Ortega
(4° ESO, IES Antonio López García, Getafe, 2005)

No puede dejar de emocionarnos que alguien que jamás había escrito un poema (y que llevaba una trayectoria académica muy negativa) fuese capaz de aceptar el juego y de escribir ese verso que ilumina todo este esfuerzo:

Si escribo, me siento vivo.

 

Juan Antonio Cardete, 6 de marzo de 2006.

(Actualizado el 12 de diciembre de 2006).

[Este artículo nació como ponencia dentro del Curso Literatura, prensa y cine organizado por el Centro de Apoyo al Profesorado de Getafe y celebrado en la Universidad Carlos III de Madrid (febrero-marzo de 2006)].

 


Este artículo fue publicado por primera vez en la página web originaria de La Sombra del membrillo en 2006.

 
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